En la semana teminada al 1° de abril, los precios de novillos, novillitos y terneros gordos cayeron entre 1 y 2%, con respecto a la anterior, que fue muy corta, mientras que las vacas se repusieron de un precio anormalmente bajo, con 13% de suba.
Si se tiene en cuenta que en los días comparables de esta semana con la anterior, la entrada aumentó 75%, se puede ver que el mercado está aceptando muy bien los actuales precios.
En perspectiva
Al comparar con los valores vigentes de hace 30, 60 y 90 días, se advierte que hoy superan en porcentajes de un dígito a todas aquellas marcas, generalizadamente.
El precio real de esta semana, 3% por debajo del reciente pico de mediados de mes, es 8% superior al promedio de 52 semanas móviles y 15% abajo del pico extraordinario de principios de diciembre.
Terminado el mes de marzo, su precio promedio deflacionado resultó algo superior a los de enero y febrero, a pesar de la mayor inflación de estos meses, y 16% más alto que el de marzo pasado.
El promedio de este trimestre es muy similar a los promedios de 2012 y de 2014 teniendo que incrementarse 13% para equiparar al promedio de 2011, el más alto de un año calendario del último ciclo ganadero (desde 2007).
Sin haber mostrado, hasta ahora, la estacionalidad propia del fin del verano para el novillo, los precios se siguen sosteniendo a pesar de todas las dificultades macroeconómicas (recesión, inflación, caída del poder adquisitivo de los salarios, tasas de interés).
Dejar un comentario