En esta semana, el precio del novillo comercializado en el mercado de Liniers cayó 4% tras una semana de estabilidad. En tanto, el de novillitos y terneros gordos llevan dos semanas de bajas, acumulando 2-5% de reducción y el de las vacas perdió en esta semana lo logrado en la previa.
Estas pequeñas variaciones, en el contexto de una entrada bastante más abundante, permiten inferir que la demanda de ganado para consumo se mostró suficientemente interesada. Las entradas de la semana pasada estuvieron 13% por encima del promedio anual y en las últimas cinco ruedas el exceso fue mayor al 50%.
Las comparaciones con los valores de hace 30, 60 y 90 días muestran estabilidad nominal para machos y livianos en un mes y mejoras de 8-11% en dos meses y de 12-14% en tres, superando cómodamente la inflación en este período. Mientras, las vacas reflejan precios mayores a razón de dos dígitos en cualquiera de los tres plazos, anticipando las mejoras en las cotizaciones que suelen verse más hacia finales del invierno/principios de la primavera.
Su precio de la primera semana de este mes superó al pico nominal de septiembre de 2017 en 28%, lo que muestra que recuperó el valor real de aquel momento.
El valor real del novillo cedió en menor medida en esta semana, pero se mantiene arriba de la trayectoria del promedio móvil de 52 semanas (3%) y quedó 5% por debajo de la cotización de hace un año.
Habrá que ver si la oferta sigue siendo abundante o si vuelve a los niveles habituales y en este caso cómo responden los precios.
Dejar un comentario