Por primera vez en seis años, el stock ganadero estadounidense supera las 100 millones de cabezas.
Según datos difundidos por el USDA, las existencias al 1° de julio alcanzaron los 102,6 millones de cabezas, marcando el tercer año consecutivo de aumento.
También fue el tercer año con una mayor proyección de terneros destetados, lo que anticipa una suba en la faena en 2018 y 2019. Además, el procesamiento creció 5% interanual en junio, con una participación de hembras algo mayor, lo que advierte sobre una ralentización de la fase de crecimiento de ganado.
En tanto, los feedlots vieron crecer la cantidad de animales encerrados que, con 1,77 millones de cabezas, superaron en 16% el volumen de junio. Este incremento se explica en parte por la sequía que registran zonas productoras del país, que provocó un aumento en los envíos a los corrales.
En este contexto, algunos analistas prevén que la fase de expansión ganadera puede llegar a 2026, con mayor producción y exportaciones.
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